En esta ocasión toca Sierra Mágina a entrar por uno de esos lugares de esta sierra que más piropos le echan todos los que por allí pasan, el Gargantón. Para ello nos vamos al pueblo de Bélmez de la Moraleda, sí el de las CARAS, por una pista en tres kilómetros dejamos el coche cerca del puente del río Gargantón. A las 10.40 horas cogemos un sendero que nos indica el nacimiento del río y el collado del Puerto. Nada más empezar a andar empiezo a comprender todo lo bien que había oído y leído sobre este lugar. Vadeando el río, con poquita agua nos vamos emergiendo en el maravilloso mundo del Gargantón, una vez acabado la zona del río vamos barranco arriba por un sinuoso senderito sobre nosotros tenemos…. no sabría describir la belleza de estos barrancos, podrías dejar volar la imaginación contemplando las siluetas fantasmagóricas que tienen las rocas. A las 13 horas llegamos a la Umbría de Pantaleón. Hay una divisoria de caminos cogeremos el de la izquierda ya que la idea es volver por el otro. Ahora cambia la decoración estamos inmersos en un impresionante bosque de enormes pinos. La subida se va acentuando cada vez más y más. Una vez fuera de la espesura del pinar salimos campo abierto y llegamos al collado del Puerto, son las 14.20 horas. Aquí el aire pegaba de lo lindo, Seguimos hacia el norte siguiendo el sendero oficial Mágina-Miramundos, pasamos por la Hoya de los Tejos hasta que llegamos al cruce, a la izquierda va al Mágina y nosotros a la derecha hacia el refugio Miramundos por segunda vez, aquí ya Eolo estaba desquiciado, íbamos a volar. Ya dentro del refugio nos sorprendió lo bien cuidado que lo tienen, sillas, una mesa, cuadros y hasta unos cuantos libros. Comimos la mar de gusto después del subidón. Después de 40 minutos de relax, abrigados con todo lo que llevamos incluyendo guantes iniciamos la bajada a las 16.15 horas, pasamos por la Rastra de las Beatas, donde hay un sinuoso senderito sobre una pedrera, por encima tenemos las Morras del Poyo de Mágina, exuberantes puntales bajo la cima de Peña Grajera. La bajada se hacía cada vez más empinada y por un terreno de piedra suelta. Pasamos por unas curiosas formaciones a las que le llaman Chimeneas de las Hadas . Una vez descendidos llegamos a la Fuentezuela, pasando por su fuente con su agua cristalina. Llegamos al Collado de la Cueva de los Lobos, idílico lugar donde los pinos laricios y las formaciones rocosas le dan un encanto aún mayor al lugar. Seguimos el descenso por el sendero de la Umbría de Panteleón hasta que llegamos al punto donde la ruta se hace lineal. Y toca adentrarnos de nuevo en el barranco del Gargantón, el sol aquí ya no da y ahora tiene un embrujo mayor aún, no dejas de alucinar con todo lo que te rodea. A las 20.40 horas llegamos al coche, eso sí, sin frontal.
Ruta de 16 kms y 1190 metros de desnivel de subida.
De las más bonitas rutas que hemos hecho en Andalucía, VOLVEREMOS!!!!!!
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